Martín Menem y la estafa cripto: El titular de la Cámara de Diputados y su presunta participación en el Criptogate

Las acusaciones de Marcela Pagano contra Martín Menem reavivan el escándalo de la estafa cripto LIBRA. En medio de una crisis interna que desangra a La Libertad Avanza, las sospechas sobre el titular de la Cámara Baja ponen en jaque al oficialismo y a Javier Milei.

El gobierno libertario tambalea. La brutal pelea entre los diputados Oscar Zago y Lisandro Almirón en plena sesión fue solo la punta del iceberg. Ahora, la diputada Marcela Pagano arrojó una bomba que amenaza con dinamitar los cimientos de La Libertad Avanza: sugiere que Martín Menem está vinculado con la criptoestafa de LIBRA. La revelación estalla en un momento de máxima tensión dentro del bloque oficialista, donde las traiciones y el caos parecen ser moneda corriente.

La periodista y diputada nacional, a quien el oficialismo intentó desplazar de la Comisión de Juicio Político, utilizó la red social X para lanzar una serie de mensajes enigmáticos pero contundentes. «Los que traicionan al presidente son los que roban en su nombre», disparó en su cuenta personal, sugiriendo que la verdadera amenaza para Milei no viene de la oposición, sino de sus propios aliados. En los pasillos del Congreso, no hubo dudas: el destinatario era Martín Menem, quien semanas atrás había retuiteado el posteo de Javier Milei promoviendo la criptoestafa LIBRA.

Pero las sospechas no se detienen en un simple retuit. La gran pregunta que resuena en el recinto es si Menem tuvo algún tipo de participación activa en la operatoria fraudulenta que, según estimaciones, dejó a miles de ahorristas en la ruina. La gravedad del escándalo es tal que algunos diputados opositores ya piden su renuncia. «Usted, presidente, con todo respeto, es uno de los que tiene que dar explicaciones», le espetó el diputado Nicolás Massot en plena sesión, antes de que Menem, visiblemente nervioso, lo interrumpiera y le cortara el micrófono.


La bronca dentro del bloque libertario es palpable. Pagano volvió a la carga al día siguiente y fue incluso más allá: «Esta vez quedó en evidencia ante el recinto quién es el verdadero titiritero, que huyó como una RATA. ¡El verdadero mariscal de las derrotas!». La diputada, que viene resistiendo los embates del oficialismo para apartarla, dejó en claro que no se va a callar. El impacto de sus palabras fue inmediato: dentro del bloque libertario ya se rumorea su inminente ruptura, lo que podría significar un quiebre sin precedentes en la bancada de La Libertad Avanza.

Mientras el escándalo cripto sigue creciendo, Menem quedó expuesto por otro hecho que lo compromete aún más: su accionar irregular para levantar la sesión del Congreso. En una maniobra que indignó a la oposición, el titular de la Cámara Baja huyó del recinto en medio de los gritos y el caos desatado por su intento de clausurar abruptamente el debate. La imagen de un Menem escapando entre empujones se volvió el símbolo de un gobierno que se desmorona.


La bronca dentro del bloque libertario es palpable. Pagano volvió a la carga al día siguiente y fue incluso más allá: «Esta vez quedó en evidencia ante el recinto quién es el verdadero titiritero, que huyó como una RATA. ¡El verdadero mariscal de las derrotas!». La diputada, que viene resistiendo los embates del oficialismo para apartarla, dejó en claro que no se va a callar. El impacto de sus palabras fue inmediato: dentro del bloque libertario ya se rumorea su inminente ruptura, lo que podría significar un quiebre sin precedentes en la bancada de La Libertad Avanza.

Mientras el escándalo cripto sigue creciendo, Menem quedó expuesto por otro hecho que lo compromete aún más: su accionar irregular para levantar la sesión del Congreso. En una maniobra que indignó a la oposición, el titular de la Cámara Baja huyó del recinto en medio de los gritos y el caos desatado por su intento de clausurar abruptamente el debate. La imagen de un Menem escapando entre empujones se volvió el símbolo de un gobierno que se desmorona.

El caso LIBRA es un fantasma que persigue al oficialismo desde hace meses. La promocionada «cripto revolución» resultó ser una burda estafa que dejó a miles de inversores sin sus ahorros, y el hecho de que varios altos funcionarios del gobierno hayan impulsado el fraude genera sospechas sobre el alcance real de la operación. Más preocupante aún es el silencio de Javier Milei, quien hasta ahora ha evitado pronunciarse sobre la posible implicación de su presidente de la Cámara de Diputados.

Pero el escándalo no solo pone en riesgo la credibilidad del gobierno, sino que también acelera el proceso de implosión interna dentro de La Libertad Avanza. La propia estructura del partido está en crisis, con cada vez más legisladores desconfiando de la conducción de Karina Milei y del propio Menem. La posibilidad de que otros diputados sigan los pasos de Pagano y abandonen el bloque es real. El legislador porteño Eugenio Casielles ya trabaja en la conformación de una bancada alternativa, lo que podría generar una fractura irreversible.

El oficialismo intenta apagar el incendio a cualquier precio. Desde Casa Rosada enviaron un mensaje tajante: «Del bloque no se va nadie». Pero el descontento dentro de las filas libertarias es innegable. La agresión verbal y física entre legisladores, el escándalo cripto y la falta de liderazgo están llevando al gobierno de Milei a un punto de no retorno.

Menem, apodado en los pasillos del Congreso como «El Señor de la Wallet», enfrenta el mayor desafío de su carrera política. Si las denuncias de Pagano y las sospechas de la oposición se confirman, su continuidad al frente de la Cámara de Diputados será insostenible. Y, con él, también podría venirse abajo el frágil castillo de naipes que sostiene a La Libertad Avanza.

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