La comunidad LGBTQI+ y aliados se movilizan hoy en más de 100 localidades para repudiar las declaraciones discriminatorias del presidente Javier Milei y defender los derechos conquistados.
Las recientes afirmaciones de Milei en el Foro Económico Mundial, que vinculan la homosexualidad con el abuso infantil y descalifican al feminismo, han generado una respuesta masiva y organizada en todo el país.
Hoy, sábado 1 de febrero, Argentina será testigo de una movilización sin precedentes: la Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista LGBTQI+. Esta manifestación, que se replicará en más de 100 localidades del país y en diversas ciudades del mundo, surge como una respuesta directa a las declaraciones del presidente Javier Milei en el Foro Económico Mundial. En su intervención, Milei no solo vinculó de manera infundada la homosexualidad con el abuso infantil, sino que también descalificó al feminismo, calificándolo como una distorsión de la igualdad.
Estas afirmaciones, cargadas de prejuicios y desinformación, han encendido la indignación de amplios sectores de la sociedad. La comunidad LGBTQI+, junto con organizaciones sociales, sindicales y de derechos humanos, han decidido alzar la voz y salir a las calles para defender los derechos conquistados y rechazar cualquier intento de retroceso. La consigna es clara: «La vida está en riesgo ¡Basta! Al clóset no volvemos nunca más».
La convocatoria en la Ciudad de Buenos Aires está programada para las 16:00 horas, partiendo desde Plaza Congreso hacia Plaza de Mayo. Pero la movilización no se limita a la capital; ciudades como Córdoba, Rosario, Mendoza y muchas otras se sumarán a esta jornada de protesta y reivindicación. Incluso, en el ámbito internacional, se han organizado marchas en solidaridad con la causa argentina.
Es fundamental comprender que esta marcha trasciende las fronteras de la comunidad LGBTQI+. Se trata de una defensa de los valores democráticos, de la igualdad y del respeto por la diversidad. Las declaraciones de Milei no solo atacan a un colectivo específico, sino que representan una amenaza para toda la sociedad. Permitir que discursos de odio y discriminación se normalicen es abrir la puerta al fascismo y al racismo, males que nuestra historia nos ha enseñado a rechazar con firmeza.
Además, es alarmante observar cómo desde el gobierno se promueven políticas que buscan desmantelar conquistas sociales históricas. La intención de eliminar el DNI no binario, la figura penal de femicidio y el cupo laboral travesti-trans son claros ejemplos de un retroceso en materia de derechos humanos.
La Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista es una oportunidad para que la ciudadanía exprese su rechazo a estas políticas y reafirme su compromiso con una Argentina inclusiva y respetuosa de las diferencias. Es un llamado a la acción, a no permanecer indiferentes ante la injusticia y la discriminación.
En palabras de una de las organizadoras de la marcha: «La respuesta a la violencia económica, a la persecución política y la represión sexual del Gobierno de Javier Milei, tiene los colores de nuestra comunidad. Juntes y en alianza a lo largo de todo el país, articulando todas nuestras diferencias, nos necesitamos ahora».
Hoy, más que nunca, es imperativo salir a las calles y demostrar que no permitiremos que el odio y la intolerancia definan el rumbo de nuestra nación. La diversidad es nuestra fortaleza, y juntos podemos construir una sociedad más justa y equitativa para todos.
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