El gobierno de Javier Milei enfrenta una nueva tormenta, esta vez vinculada a un escándalo internacional de fraude con criptomonedas. Según una investigación de la televisión pública alemana y el New York Times, el mandatario argentino habría promovido, de manera directa, una criptomoneda que resultó ser una estafa piramidal, causando pérdidas por más de 250 millones de dólares a los inversores. Además, el informe sugiere que algunos de los principales involucrados en el fraude accedieron a reuniones con el presidente a través de intermediarios y presuntos pagos.
De la «ayuda a emprendedores» al fraude financiero
En febrero, Javier Milei promocionó la criptomoneda «Libra» como parte de un supuesto plan para impulsar a pequeños emprendedores en Argentina. Su mensaje en redes sociales, tanto en X (ex Twitter) como en Instagram, generó una ola de inversores que confiaron en la palabra del presidente. En cuestión de minutos, el valor de la criptomoneda pasó de cero a 4,7 dólares, y su capitalización global escaló hasta los 4.500 millones de dólares.
Sin embargo, poco después se destapó el fraude: las billeteras que concentraban la mayoría de los activos digitales retiraron 90 millones de dólares, provocando un desplome del 86% en el valor de Libra. Los inversores perdieron un total de 251 millones de dólares, según datos de la firma de investigación Nansen.
Reuniones secretas y pagos para acceder a Milei
La investigación del New York Times reveló que varios de los principales implicados en el escándalo cripto participaron en un foro tecnológico en Buenos Aires, donde lograron reunirse con el presidente Javier Milei. Según el medio estadounidense, estas reuniones fueron facilitadas por intermediarios que habrían recibido pagos para garantizar el acceso a la cúpula del gobierno argentino.
Los principales nombres involucrados son Mark Hayden Davis, CEO de Kier Ventures, y Julián P., CEO de Kip Protocol, ambas empresas responsables del lanzamiento de Libra. Ambos empresarios estuvieron en Argentina en varias oportunidades y mantuvieron encuentros con Milei desde 2023 hasta principios de 2024.
Un presidente en la mira: la estrategia de desvinculación
Luego de que la estafa quedara expuesta, Milei intentó desligarse del escándalo alegando que «no se había interiorizado correctamente» sobre el proyecto. Sin embargo, su participación en la difusión inicial de Libra fue clave para que miles de personas confiaran en la criptomoneda.
El programador y profesor Maximiliano Firman, consultado por la televisión alemana, señaló que «nos enteramos de la existencia de esta criptomoneda por un tuit y un mensaje en Instagram del presidente argentino. La gente confió en que se trataba de una inversión en tecnología y en empresas pequeñas en Argentina. Pero en muy poco tiempo quedó claro que había un fraude financiero detrás y que el dinero desapareció».
El dinero perdido y el futuro del escándalo
Hasta el momento, Mark Hayden Davis asegura que tiene en su posesión 100 millones de dólares, aunque algunas estimaciones indican que podría tener una cifra mucho mayor. El empresario no ha aclarado si planea devolver los fondos a los damnificados.
Mientras tanto, el escándalo pone en el centro de la escena la falta de regulación sobre las criptomonedas y la irresponsabilidad del gobierno de Milei al avalar iniciativas privadas sin ningún tipo de control. La oposición ya exige explicaciones y se abren interrogantes sobre la posibilidad de que funcionarios del gobierno hayan estado involucrados en la trama del fraude.
El «presidente libertario» que pregona la «supremacía del mercado» acaba de demostrar que, cuando se trata de negocios turbios, el Estado mínimo solo sirve para facilitar grandes estafas. Y esta vez, los damnificados no fueron solo argentinos, sino inversores de todo el mundo que confiaron en la palabra de un presidente que, una vez más, se muestra incapaz de asumir responsabilidades.
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