En una entrevista radial, Alonso desnuda las consecuencias sociales del ajuste económico, analiza el caso del asesinato de Matías Paredes y cuestiona la lentitud de la Justicia para enfrentar el narcotráfico.
En una entrevista con Futurock FM – Ahora Dicen, Javier Alonso, ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, no solo abordó el polémico caso del asesinato de Matías Paredes en Mar del Plata, sino que también trazó un panorama alarmante sobre el aumento de la inseguridad en el Conurbano, directamente vinculado a la devaluación impulsada por el gobierno de Javier Milei en diciembre de 2023.
«La gran devaluación que hizo Milei generó un pico de conflictividad en la calle», afirmó Alonso, quien detalló que el delito creció un 7% en 2024, con un repunte significativo en robos y sustracciones de automotores durante los primeros meses del año. «Eso se aplacó con mucho trabajo en la calle, pero cerramos el año con un promedio de aumento del delito del 7%», señaló el ministro, quien no dudó en responsabilizar a las políticas económicas del gobierno nacional por el deterioro social.
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El caso de Matías Paredes, el joven de 26 años asesinado por policías de civil en Mar del Plata, fue otro de los ejes de la entrevista. Alonso explicó que los cinco efectivos involucrados fueron desafectados de la fuerza y detenidos por orden fiscal. «El fiscal está avanzando con las pericias, fundamentalmente las armas, para esclarecer quién disparó», indicó, y aclaró que el operativo se enmarcaba en la búsqueda de Munge, un peligroso delincuente sindicado como responsable del asesinato de un quiosquero.
«Nos encontramos con una policía que no estaba trabajando como correspondía», admitió Alonso, quien destacó los esfuerzos por reformar la fuerza, desde la selección y formación de nuevos efectivos hasta el reentrenamiento del personal existente. Sin embargo, reconoció que los cambios llevan tiempo y que casos como el de Mar del Plata exponen las falencias de un sistema que aún está en transición.
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El ministro también criticó la narrativa oficial sobre la inseguridad, en particular las declaraciones del presidente Milei sobre un «baño de sangre» en el Conurbano. «Se contrapone con las declaraciones de la ministra (Patricia) Bullrich, que dice que somos el país con menos homicidios», señaló Alonso, y recordó que en 2024 se registraron 810 homicidios, la cifra más baja en dos décadas. «Lo que se ve es un intento coordinado de hacer creer que el Conurbano es un caos, cosa que no es cierta», afirmó.
En cuanto a las herramientas para combatir el delito, Alonso fue contundente: «Tenemos que mejorar los marcos normativos y la aplicación de la ley que hacen los jueces». Criticó la liberación de delincuentes peligrosos y abogó por agravar las penas para quienes porten armas de fuego. «Detenemos a alguien con una .22 o un .38 que disparó y queda en libertad porque las penas son bajas. Eso tiene que cambiar», insistió.
El narcotráfico fue otro de los temas centrales. Alonso denunció la lentitud de la Justicia para autorizar allanamientos en puntos de venta de droga y cuestionó la desfederalización de las causas por narcomenudeo. «La Justicia Federal prácticamente no persigue el narcotráfico, y terminamos deteniendo a pibes pobres mientras los líderes de las bandas están sueltos», afirmó.
Pese a los desafíos, el ministro destacó los avances en la lucha contra el crimen organizado, como la desarticulación de la banda de Los Monos en Rosario y su conexión con bandas paraguayas. «Para eso es clave la actuación de las fuerzas federales y el Ministerio de Seguridad de la Nación», concluyó Alonso, quien mantiene una relación «más o menos» cordial con su par nacional, Patricia Bullrich.
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