Gabriel Katopodis, ministro de Infraestructura de la Provincia, denunció en Urbana Play que el gobierno nacional recortó $700.000 millones destinados a seguridad. «No hay una sola decisión de Milei para mejorar la situación», afirmó.
En una entrevista radial en Urbana Play – De acá en más, Gabriel Katopodis expuso el impacto del desfinanciamiento del gobierno de Javier Milei en la seguridad y la infraestructura bonaerense. «No es politiquería: necesitamos recursos, no tuits», sentenció, mientras la tensión Nación-Provincia escala ante la ola de inseguridad en el conurbano 79.
La provincia de Buenos Aires se ha convertido en el campo de batalla de un pulso político que trasciende las grietas ideológicas: el desmantelamiento sistemático de fondos por parte del gobierno nacional. Gabriel Katopodis, ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de Axel Kicillof, lo resumió con crudeza en Urbana Play: «Milei recortó $700.000 millones que teníamos para seguridad. Con eso, hubiésemos comprado 10.000 patrulleros». La cifra no es retórica: según la Fundación Éforo, la inversión pública en la Provincia cayó un 89% en 2024, la más afectada del país 10.
Katopodis, exintendente de San Martín y figura clave del peronismo bonaerense, no ahorró críticas: «El gobierno nacional no ha tomado una sola medida para mejorar la seguridad. Solo recortes y campañas en redes». Sus palabras reflejan un conflicto que ya escaló a la Justicia: Kicillof judicializó la eliminación del Fondo de Fortalecimiento Fiscal, creado en 2020 para compensar a la Provincia durante la pandemia, y que Milei derogó mediante decreto, quitando $873.765 millones anuales 46.
El costo de la «motosierra» fiscal
La administración Milei justifica los recortes como parte de un «ajuste necesario» para ordenar las cuentas públicas. Sin embargo, los datos son contundentes: las transferencias de capital a provincias cayeron un 76% en 2024, con un golpe brutal a seguridad, educación y obras viales 210. En el caso de Buenos Aires, esto se traduce en rutas abandonadas —como la Ruta 3 o Presidente Perón— y un sistema de seguridad colapsado. Katopodis recordó que un tercio del precio de la nafta está destinado por ley a mantenimiento vial, pero «Milei y Caputo manejan esas cuentas sin invertir» 57.
El ministro fue claro: «No es inteligente tener la obra pública parada en un país con nuestra extensión territorial». El 50% de las exportaciones argentinas dependen de la logística bonaerense, un nodo crítico hoy en estado de abandono. Mientras, el gobierno nacional prioriza desfinanciar programas como el Fondo de Integración Socio Urbana (FISU), vinculado a urbanización de barrios populares, en lo que Katopodis tildó de «ataque ideológico» 46.
Seguridad: entre balas y extorsión
La tensión alcanzó su pico con la negativa de Milei a desplegar fuerzas federales en el conurbano. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, condicionó el envío de Gendarmería a que Kicillof lo pidiera «públicamente», un guiño político en año electoral 9. Katopodis rechazó el teatro: «No es un favor, es su responsabilidad. No necesitamos operativos espasmódicos, sino presencia sostenida» 7.
La ironía es palpable: en 2024, el gobierno nacional eliminó $270.000 millones recaudados para reparar rutas, según Katopodis, mientras Bullrich celebraba una reducción del 24% en homicidios en Moreno, un municipio que terminó el año con 38 asesinatos 9. Para el ministro, la seguridad no se resuelve con «balas o frases para la tribuna», sino con prevención y un Estado presente: «Milei desmantela escuelas, universidades y programas sociales. Eso solo agrava el problema» 7.
El laberinto político
Detrás de los números hay una pulseada por el poder. Milei busca estrangular fiscalmente a Kicillof, su principal adversario electoral, mientras el gobernador resiste con una estrategia judicial y mediática. La derogación del Fondo de Fortalecimiento no solo afecta la seguridad: según la Oficina de Presupuesto del Congreso, también eliminó $15.000 millones mensuales para salarios policiales 4.
Katopodis no se muerde la lengua: «Es un modelo de extorsión: atacan a las provincias y luego les piden que firmen acuerdos». La referencia al Pacto de Mayo es directa: Milei intenta forzar a los gobernadores a avalar su reforma económica, pero Santa Fe, Chubut y Buenos Aires ya anunciaron demandas judiciales 8.
El conflicto Nación-Provincia ya no es una grieta: es un abismo. Mientras Milei celebra recortes como «victorias contra la casta», el conurbano arde con rutas destruidas, fuerzas policiales precarizadas y una ciudadanía atrapada entre la inseguridad y el ajuste. Como sentenció Katopodis: «La única salida es coordinar, no extinguir». Pero en la Casa Rosada, la sordera parece ser política de Estado.
Deja una respuesta